Estefano

San Judas Tadeo, fiel intercesor y protector de los que se encuentran en momentos de desesperación, te ruego humildemente que escuches mi plegaria. Estoy ante ti con fe y esperanza, buscando un milagro de curación. Mi cuerpo y mi alma necesitan tu poderosa intercesión ante Dios. Te pido que, por tu gracia y misericordia, me concedas la sanación total y definitiva. Que el poder divino cure mis dolencias y me devuelva la salud y la paz que tanto ansío. Te suplico, San Judas Tadeo, que me ayudes a superar esta difícil prueba con tu ayuda y protección. En ti confío plenamente, sabiendo que, con tu intercesión, lo imposible se vuelve posible. Amén.