Karen
San Judas. Continúo pidiendo tu ayuda divina con mi hijo Daniel para que lo ayude a darse cuenta de su adicción y para darle la fuerza eterna para superar sus efectos debilitantes. Está paralizando a nuestra familia y tengo tanto miedo de que el resultado sea potencialmente mortal. Por favor, permítale que me permita ayudarlo en esta lucha para que pueda librarse de esta pesadilla. Gracias.